Cosmología Dillom

Publicado: 3 May, 2024
Autor: Esteban Baldomar

Algo dijo Cronenberg sobre la oscuridad del pensamiento y la lucidez de esos refucilos.

Cada vez que escribo pienso en dos lectores hipotéticos. Uno que me va a decir Ok a esto le falta mostaza y otro que se acerca y me ayuda a construir en los surcos su sentido más preferencial. Esos dos lectores están en el mismo café pero en horarios distintos. Y pienso decirles que estuve escuchando el último disco de Dillom, por el cual inauguré al artista, no lo conocía hasta este disco. El disco se llama Por Cesárea. Nació el día 26 de Abril del 2024. Para los estudiosos de la numerología el 26 es el número de Dios. Ya que por supuesto el 13 es el arcano sin nombre en el Tarot de Marsella, a veces nombrada la muerte. El 26 es la cosmología. El acuario entonces tiene el ying yang completo. Lo más importante también de los discos y los libros son las cosas que interrumpen. Su accidente.

Este disco es una estampida de búfalos en la 9 de julio, búfalos a color y blanco y negros. Hay reminiscencias de Beastie boys, Kaytranada, Mac Miller, Charly García, y otras cosas que se me escapan de la coctelera. La poesía es urbana, profunda, metafórica, literal. Me hace acordar cuando leía a los poetas beatnicks por ejemplo: Allen Ginsberg y Jack Kerouac. En el disco hay caries, buenos tiempos, y nuestro peor enemigo. Esa sensación también de algo ricotero absolutamente necesario en la música argentina. La nave espacial depositó un huevo luminoso en el riachuelo y nació un profeta ángel de mercurio.

Me dejo llevar por el disco. Me despabila. Me activa la personalidad. Puedo ir a ver boxeo escuchando esto o andar en auto y las calles al azar se ponen cine. El disco es contaminación de belleza en sus sampleos, recortes, fragmentos. La navaja recorta un jazmín. Un jazmín dulce apenas tocado por una lluvia para nada berreta.

Esteban Cristóbal Baldomar

@estebancristobalbaldomar